Navidades de mi juventud

Hay una frase de navidad que dice "Feliz, feliz Navidad," la que hace que nos acordemos de las ilusiones de nuestra infancia, y es cierto que las celebraciones navideñas son mágicas para los niños, verdaderos protagonistas de estas fiestas. Por eso desde el Centro Guadalinfo y la Biblioteca Municipal os deseamos que vosotras las mayores seáis exclusivamente las protagonistas que tanto disfrutabais en estas fechas con juegos, dulces navideños, aguinaldos, villancicos, etc.
Para ello, os dejamos a continuación una colección de redacciones en las cuales se relatan lo vivido en las Navidades de vuestra juventud.


Caridad Jiménez Yébenez

Las navidades de mi juventud eran distintas a las de hoy. Al pensar en ellas me doy cuenta de que había menos ropas para ponernos y menos cosas para comer, pero nos divertíamos más que ahora. Yo recuerdo que nos juntábamos todas las vecinas y cantábamos villancicos, tocábamos la zambomba, las panderetas, los platillos etc. Íbamos a las casas de las vecinas a pedir el aguilando y cantábamos copillas, os voy a decir unas cuantas:

A esta puerta hemos llegado

cuatro amigas a cantar

si queréis que cantemos

permiso debéis de dar.


A esta puerta hemos llegado

cuatrocientas en cuadrilla

si queréis que nos sentemos


sacad cuatrocientas sillas.


Otras de las cancioncillas eran para pedir el aguilando.


El aguilando real

son tres libras de tocino

un doblez de longaniza

y arroba y media de vino.


Levántate Rosa hermosa

con tu pelo lindo y largo

y te pones las enagüas

y nos das el aguilando


levántate Juan Antonio

y vas abriendo la alacena

que valla sacando pronto

cosillas de Noche Buena


Dame el aguilado estrella

dámelo cara de Rosa

que lo estamos esperando

de tu manos generosa


Para despedirnos le cantábamos otra, que era algo como esto.


Echemos la despedia

con la hoja de un pimiento

que la música no ha sido

como ha sido el merecimiento


Echemos la despedia

yo no la quisiera echar

que en la casa que yo estoy

yo me quisiera quedar


Echemos la despedia

con un granito de arroz

que la gente de esta casa

todos se queden con dios


Y ahora ya se despide una amiga desde Algarinejo.

Caridad Jiménez Yébenes


Carmen Ariza Nieto

Algarinejo 21 del 2 del 2011

Soy alumna de guadalinfo, también de la escuela de mayores, aún no me considero mayor porque de animo y energía me encuentro bastante animada y por eso me atrevo a contar algo de mi juventud, en particular os cuento de la navidad. Llegado el mes de Noviembre ya empezábamos, nos juntábamos los vecinos para hacer las zambombas y también las cañarracas, este instrumento se hacia de un trozo de palo de olivo que fuera derechito y estuviese seco y con la navaja se le hacían unas rayas como surcos y se tocaba con un palote, se acompañaba con la zambomba, el almirés, la botella de aguardiente y las voz de los cantantes, solían ser los vecinos mas cercanos, los padre y los niños, todo esto era cuando yo era joven y se cantaban villancico y se acompañaba la fiesta con copitas de aguardiente mantecados y roscos de vino. Estos dulces se hacían en casa de vecinos, los que tenían horno de leña, buscaban la leña en el campo para caldear el horno y hacían los mantecaos la noche de antes para por la mañana temprano ir a cocerlos y se comían la noche buena. Se hacía potaje de bacalao, batatas y arroz con leche, todo esto era la parte de los padres y los pequeños y los mocitos salían la noche buena de casa en casa a pedir el aguilando. Los dueños les sacaban los dulces y el aguardiente para convidarlos y a cambio les cantaban unas coplillas de la navidad como villancicos de los campanilleros y todos se divertían.

Ahora os voy a decir cuales son los ingredientes para los mantecaos, raspadura de limón, canela, ajolín, almendras molidas y un chorrito de anís. Como se hacían de año en año se echan 5 kilos de harina, 2 de manteca, todo se revuelve en caliente y se hacen con la mano.

Aquí os dejo algunas coplillas de navidad que recuerdo y dicen así:

A esta puerta hemos llegado

cuatrocientos en cuadrilla

si queréis que os cantemos

sacar cuatrocientas sillas


Esta noche es noche buena

y mañana es navidad

saca María la bota

que me vas a convidar


A esta puerta hemos llegado

a pedir el aguilando

y me lo tienes que dar

sino es hoy será mañana

de aquí no me voy sin na


Echemos la despedía

con un granito de arroz

que la gente de esta casa

todos se queden con Dios

Se despide una amiga, Carmen Ariza desde Algarinejo.

Aurora Puerto Porcuna

Las navidades de mi juventud.

Se celebraban diferente a las de ahora, antes había muy poco dinero para celebrar pero lo pasábamos muy bien, tocábamos la zambomba y una pandereta y cantábamos villancicos y pedíamos “el aguilando” por las casas, el aguilando eran unos cuantos mantecados o tortillas que los hacíamos antes de la navidad. Íbamos al molino de pan para cocerlos en el horno y los poníamos en una canasta de mimbre y ya para casa. Se guardaban como oro en paño para los momentos especiales y ahora os voy a contar algo de los reyes. Los reyes de antes no los conocíamos porque era un lujo y no había dinero para nada mas que para lo preciso y ya me despido con una receta de mantecados caseros.


Ingredientes:

harina, azucar, manteca de cerdo, ajolin, canela.

Preparacion:

Se derrite la manteca y se pone en un recipiente y se echa la harina, la manteca, el azucar, el ajolin y la canela. Todo se hace una mezcla y se amasa muy bien y ya se hacen los mantecados, luego se cuecen y listo para comer.

Carmen Puerto Porcuna

Las navidades de antes.

Cuando yo era joven veía yo que las navidades no eran como las de ahora. Antes cada uno se quedaba en su casa ya que no había comida para invitarlos a todos y las comidas eran potaje bacalao batatas cocidas y mantecados que se hacían en el molino. Venían los animeros o zambomberos cantando por los cortijos y se les regalaban mantecados y aguardiente después de dedicarnos sus canciones.

El día de nacimiento venían “los tontos” que eran hombres vestidos con lazos y alfileres que les daban las mozuelas, ellos daban saltos para pedirle algo a las mozuelas y nosotras asustadas les regalábamos medallas, alfileres, lazos... lo que cada una tenía.

El día 31, las mozuelas nos juntábamos en los cortijos y nos comíamos las uvas, hacíamos una fiesta tocando con un pito de caña, bailando y cantando, haciendo corros, nos divertíamos mucho, y así eran nuestras navidades.

El día los reyes no teníamos regalos pero nos hacíamos nuestras propias muñecas de trapo, estaban hechas de retales de tela y rellenas de lana y los niños hacían escopetillas de caña o una vareta atada con una tomisa y aquello decían que era su borrico.

El día San Antón, (17 de Enero) se juntaban los tontos y les daban cebollas, morcillas, granadas... de lo que había en las casas y se celebraba una fiesta en la Ermita del Serval que hay una imagen de San Antón. Ellos rifaban los regalos que les habían dado y el dinero que conseguían era para alguna promesa que tenían.


Las navidades de antes eran más divertidas que ahora por que aunque no teníamos tantas cosas disfrutábamos mucho más que ahora.

Se despide una amiga desde Algarinejo.


Dolores Arévalo Ramos

Las navidades de mis tiempos de joven eran muy divertidas, nos juntábamos amigas y vecinas cada una con su instrumento que eran zambombas, carrañacas, platillos, una botella de anís y algunos tenían guitarras y cada noche en una casa, casi siempre se corría la voz y organizábamos una fiesta, cantábamos villancicos hacíamos corros bailamos la molinera la llenca y hasta la vaca lechera jugábamos al anillo y al ramito de flores al tintín de la correjuela y lo mas importante con la ilusión que lo hacíamos todo. Pero con el tiempo todas las ilusiones se van desapareciendo y quedan menos ganas de cantar y bailar. Pero ahora nos queda otra etapa que también tiene sus valores nos juntamos todas las mayores y nos lo pasamos muy bien vamos a la escuela a los ordenadores, también vamos a varios viajes cosa que antes no disfrutamos, así es que buscando el lado positivo a las cosas todos los tiempos tienen sus valores, ahora nos queda recordar todo lo bueno y malo que hemos vivido pero siempre ahí que quedarse con lo positivo. Sin otra cosa por el momento se despide Dolores Arévalo desde Algarinejo.

Emilia Arenas Delgado

Os voy a contar algo de las navidades de cuando yo era joven, eran muy distintas a las de hoy pero lo pasábamos muy bien, antes había mulos y vacas para cultivar la tierra y mis hermanos tenían que por la noche levantarse dos veces a echarle de comer. Como por navidad son las noches muy largas y ello las echaban cantando, y al otro día les decíamos, no os da lastima de despertarnos, y ellos decían, no quiero que se me olviden las coplas de navidad y por eso os voy a contar una pocas de las que me acuerdo.


A tu puerta hemos llegado

cuatro cientos a cantar

si quieres que te cantemos

licencias nos has de dar


licencia pro mi tenéis

de mis padres no lo se

pero sentarse y canta

que yo se la pediré

subió la niña parriba

toda llena de primor

padre me da usted licencia

para que cante mi amor


si sabes que no lo quiero

ni de mi gusto es que cante

pero ya que a comenzao

baja y dile que remate


bajo la niña pabajo

toda llena de alegría

amor mio pasa y canta

hasta que llegue el día


Adivinanzas de mi Memoria

Aprovechando los recursos de que dispone la Biblioteca de Algarinejo tales como el libro Una, dola, tela, catola de Carmen Bravo Villasante o Aquellos años. Pervivencias y recuerdos editado por las antiguas alumnas de la escuela de adultos de la localidad, nos hemos reunido para leer estas obras y así refrescar nuestra memoria y recordar adivinanzas de nuestra juventud.




Posteriormente en el Centro Guadalinfo, y con ayuda del procesador de textos, las mujeres han escrito las adivinanzas que recordaban y que forman parte de su tiempo de mocedad, algunas de ellas conservan aún la picaresca de aquellos años.



La actividad ha finalizado con la creación de marcapaginas personalizados con las adivinanzas que las mujeres han elaborado para que le sirvan de guia en sus próximas lecturas.







Listado de autoras de las ADIVINANZAS DE NUESTRA MEMORIA.

Nuestras Vidas

Mi Vida. Silveria Perálvarez.

Soy Silveria una vecina de Montefrío, aunque ahora mismo llevo unos 4 años viviendo en Algarinejo.

Me crié en el campo, en un cortijo llamado Rincón de Turca que pertenece a Montefrío, aunque en el correo siempre hemos puesto que era de la zona de Algarinejo. Desde chiquitilla he trabajao con el ganao, en las faenas de la casa ayudandole a mi madre, también he bordado mantillas y esta era una tarea que hacía mientras estaba en el campo guardando el ganao, sobre todo cabras y ovejas. Después cuando ya era más mayorcita me enseñe a coser, y hacía toda la ropa que necesitábamos en la casa, mi hermana también cosía y me ayudaba en esas tareas.

Eramos tres hermanos y nos hemos criado muy unidos aunque no vivíamos en el mismo sitio.

Me casé con 19 años, y me fui a vivir a otro Cortijo en Montefrío llamado Cañada de Moreno y he estado viviendo allí durante 43 años, mi vida ha sido siempre la misma rutina , el campo, los hijos, la casa y el huerto. Allí nacieron mis dos hijos, se han criado, se han casado y después cuando ya nos quedamos solos mi marido y yo nos vinimos al pueblo. Mientras trabajaba en el campo me saqué el carnet de conducir, con mucho trabajo y constancia, pero gracias a el voy y vengo a donde quiero, todo esto fue gracias a la escuela de adultos que me dio esta oportunidad. Aunque me encanta visitar el cortijo y darle vuelta al huerto y todas las demás faenas.

Tengo una nieta muy guapa y graciosa junto a la que vivo y también un nieto y otro en camino. ¡ Estoy muy feliz de la vida que tengo ahora !

Gracias a dios




Mi Vida. Caridad Jiménez Yébenes.

Hola soy una vecina de Algarinejo, y os voy a contar un poco de mi vida. Nací en el campo el día 3 de Abril de 1941, en un cortijo llamado Solana de la Bejorca, termino de Montefrío. Mis padres han sido agricultores y he trabajado mucho, éramos siete hermanos cinco varones y dos hembras. Los varones se iban al campo con mi padre, a hacer las tareas del campo y nosotras nos quedábamos con mi madre a hacer todas las tarea de casa, como antes no había ropa hecha, comprábamos la tela y hacíamos las camisas, los pantalones, las chaquetas, los vestidos … etc.

Con 17 años me eché novio, y a los 19 me casé y nos fuimos a vivir al Rincón de Turca a otro cortijo, allí estuvimos 33 años, nacieron mis hijos y trabajé en toda clase de faenas, en el campo, en la casa, y criando a mi hijos. Estando allí se me casaron los 4 y les dimos la tierra para que la cultivaran ellos, entonces nosotros nos vinimos a Algarinejo al lado de mi hija y ya nos cambio la vida. Cada día tenía menos trabajo, y gracias a Dios estamos los dos, mi marido y yo, para disfrutar un poco, podemos viajar y hemos visto muchas cosas en Andalucía y fuera. Mi marido se va al hogar todas las tardes a echarse la partida y yo estoy apuntada a la escuela de adultos y a Guadalinfo y tenemos unas profesoras muy apañadas y simpáticas y tienen mucha paciencia con nosotras.

Me despido de todas vosotras con un fuerte abrazo.

Caridad Jiménez Yébenes




Mi Vida. Carmen Ariza Nieto.



Damas y caballeros soy una vecina de Algarinejo y como tal os cuento que nací en Montefrío en el año 1944, el 16 de Enero. Me he criado en el campo y mis padres han sido labradores y como me he criado allí yo he hecho toda clase de faenas de campo: he segado trigo,también habas,garbanzos, he cogido aceitunas, he sembrado toda clase de cereales; también los he cultivado en verano moviéndoles con un legón la tierra para quitarle las hierbas.Todo esto lo he hecho en compañía de mis padres y también de mis hermanos porque también tengo tres hermanos varones y de los cuatro yo soy la mayor y la niña de la casa. Recuerdo irme al campo con las cabras y sentarme al sol y cantar en compañía de mis amigas o buscar collejas u otro tipo de alimento que se criara en el campo, son pequeñas cosas que hacían los días agradables y entretenidos. Todo esto hasta los 20 años,porque con esta edad ya me casé y me marché a un cortijo llamado las Bañas en compañía de mi marido José.
Al año de casada tuve mi hijo y ya desde entonces tres oficios tuve: ayudarle al campo, cuidar de mi hijo y también de mi casa,cosas como guisar,planchar,coser,lavar,pintar el cortijo, cuidar de los cerdos,cabras,gallinas,pavos,conejos y toda clase de animales.Esto fue hasta los cuarenta años, que fue cuando me vine a Algarinejo,el que ahora es mi pueblo del cual estoy orgullosa de vivir en este pueblo precioso y con agradable gente.
Bueno, ahora desde que llegué a este pueblo como aquí no tenía campo ni tampoco animales yo, como tantas familias humildes,necesitaba seguir trabajando. Entonces me dediqué a trabajar de limpiadora en las casas y por supuesto también a cuidar de mi casa y mi familia que por entonces se componía de mi matrimonio,mi hijo,mi nuera y también mis padres que ya estaban mayores. Esto hasta el día de hoy y ahora compongo mi familia de cinco personas: yo mi hijo,mi nuera y mis dos nietos FRANCICO JOSÉ Y JENNIFER ROCÍO y termino esta carta con un cordial saludo para todos los andaluces y casas GUADALINFO Y EL PERSONAL QUE NOS ATIENDE CADA DÍA.



Mi historia. Aurora Puerto Porcuna.


Me llamo Aurora y nací en Algarinejo y les voy a contar mi vida. Yo nací en 1942 justo después de la guerra civil, yo me acuerdo de que había mucha hambre, teníamos que trabajar, que guardar pavos y demás animales, eramos nueve hermanos, mis padres vivían en el campo y todos teníamos que trabajar mucho para comer y ayudar a nuestros padres.
Luego me eche novio, tenía 17 años, eramos vecinos del mismo pueblo, cuando nos casamos estuvimos viviendo en el pueblo durante unos años y después nos fuimos a vivir a Barcelona con una cuñada, la hermana de mi marido, ya teníamos dos niños pero el irnos a Barcelona fue lo mejor que hicimos por que encontramos trabajo mi marido y yo.
En aquellos tiempos, la época de Franco, había mucho trabajo, yo me coloque en el hospital en la lencería y plancha y a los tres meses ya me hicieron fija , que ahora en los días que vivimos es muy difícil colocarse en un trabajo. Luego a los doce años me quede embarazada y tuve dos niñas mellizas, todos fuimos muy felices, mi marido y mis hijos me ayudaron mucho, a los cinco meses me tuve que ir a trabajar, las niñas me las llevaba a la guardería, todas las mañana me las llevaba cuando yo me iba a trabajar ya que la guardería estaba en el hospital y lo teníamos mejor y cuando tenían tres años pedimos traslado para Granada y nos lo dieron. Ya nos vinimos y estuvimos veinticuatro años trabajando en Granada y ya me he jubilado y ahora hemos vuelto a nuestro pueblo para descansar, a mi marido le gusta mucho el campo y tiene un pequeño huerto y allí se entretiene. Yo voy a la escuela de adultos y también voy a Guadalinfo y tenemos una profesora muy apañada que se llama Elena y tiene mucha paciencia con nosotras porque nos cuesta mucho aprender. Esta es mi vida, todas las mañanas cuando me levanto le doy gracias a Dios por todo lo que me ha dado y ya me despido desde Algarinejo un saludo para todos.
A 15 de Octubre de 2010.



Mi vida. Valeriana Jimenez Yébenes.


Hola soy Valeriana y vivo en Algarinejo aunque yo no nací aquí, yo nací en un cortijo en las Navas de Priego provincia de Córdoba. Cuando yo tenía veinte días, se vino mi familia a La Bejorca, que era un cortijo en el que vivían unos tíos míos, aunque nos vinimos a vivir juntos porque mis padre hicieron una casita enfrente muy pequeña, para tanta familia porque ya veníamos ocho hijos y después nació otro, así es que ya eramos nueve y nuestros padres. Labrábamos tierras de aquel cortijo donde vivían mis tíos, pero cuando yo tenia cinco años ocurrió una desgracia murió mi Padre y nos quedamos sin el, mi hermana la mayor ya estaba casada y mi hermano el que la seguía tenia unos dieciocho años, pero pronto se casó y los demás estábamos todos muy jóvenes, mi madre no podía trabajar por que tenia que cuidar de nosotros. Yo recuerdo a mi madre siempre lavando o cosiendo, nos puso a guardar animales, los más pequeños guardábamos los pavos, otros guardaban las cabras y otros los cochinos y pronto empezamos a trabajar ayudando a los mayores en el campo, haciendo de todo. También íbamos a otros cortijos a ganar el jornal, yo recuerdo mi primer jornal, gane diez pesetas, tendría yo unos nueve años, después nos fuimos haciendo mayores y nos fuimos casando. Todos nos casemos muy jóvenes, yo me case con 18 años y me fui a vivir con mis suegros y estuvimos un año juntos. Al año nos pusimos aparte, pero puerta por puerta y a los 3 años nació mi hija, allí estuvimos 12 años, después nos vinimos a vivir a los Nevazuelos, donde nació mi hijo. A los 10 años de nacer mi hija recuerdo haber trabajado mucho pero ya llevamos casi 20 años de vivir aquí en Algarinejo. Ya estamos jubilados y hacemos cada uno lo que mas nos gusta, a mi marido le gusta el hogar del pensionista, jugar a las cartas, al domino y a la petanca. A mi me gusta pasear con mis amigas, ir a la escuela de adultos y a informática. Tenemos unas profesoras muy apañadas, tienen mucha paciencia con nosotras y lo pasamos muy bien. Yo doy gracias a dios por que a estas alturas de la vida estamos los dos juntos y no tenemos ninguna enfermedad grave. Gracias a dios que sea por mucho tiempo.
Bueno ya os he contado un poquito de mi vida, aunque no lo he contado todo por que necesitaría escribir un libro y prefiero dejarlo aquí terminado.
Hoy a 20 de Octubre del 2010.



Mi Juventúd. Dolores Arévalo Ramos.


Me llamo Dolores Arévalo y voy a contarles lo que recuerde de como fue mi vida de joven, me crié muy feliz al lado de unos padres que me dieron mucho cariño, y una educación lo mejor que supieron, por lo que estoy muy agradecida a la vida, pues aunque tuve que trabajar desde muy temprana edad en el campo en toda clase de trabajos, cuidando animales, después cogiendo aceitunas y recogiendo toda clase de cereales, también recolectándolos en las eras, allí se molía, se separaba la paja de con el grano, y después se guardaba todo. Fueron unos tiempos muy sacrificados y muy miseros, pero a pesar de todo vivimos muy felices y contentos, respetando a nuestros padres y nuestros mayores, pues aunque no he tenido ninguna clase de estudios solo escuchando los consejos nuestros mayores y la experiencia que me a dado la vida a lo largo de los años, les pediría a los profesores y responsables de la educación que les dieran otra asignatura mas a los jóvenes, sería que respetaran mucho a los mayores y supieran valorar las muchas y buenas oportunidades que les esta ofreciendo la vida.



Mi Vida. Carmen Puerto Porcuna.


En Algarinejo a 5 de Noviembre de 2010.
Me llamo Carmen Puerto Porcuna y soy vecina de Algarinejo, soy una señora de mi casa y me gusta mucho limpiar, antes me gustaba hacer ganchillo, he hecho varias colchas pequeñas y otras más grandes y encajes para la iglesia de mi pueblo.
Nací en la Sierra de Ballate aquí cerca de Algarinejo en la Poyata, también conocida como la sierra Pelona, había una casita pequeña en medio de la sierra, y es allí donde nací, me pusieron Carmen como a mi abuela. Me crié con mi abuela ya que antes era tradición que los hijos se fueran con algún familiar cuando estos estaban solos, la llamaba “mamabuela”, y ella vivía en un cortijo llamado El Nevazo que estaba cerca de donde vivían mis padres y la quería mucho. Le traía el agua para la casa, le carreaba su cabrilla y mi padre iba a visitarnos y le preguntaba que como se portaba la niña, ella siempre le contestaba que muy bien.
Más tarde, cuando ella falleció, me vine con mis padres que vivían en Los Portillos, para la carretera de Priego, yo ya era mozuela, y fue entonces cuando conocí al que ahora es mi marido. Nos casamos después de que el hiciera la mili con unos 24 años.
Recuerdo mi boda que era distinta a las de ahora, antes se repartían dulces, galletas, roscos de vino … y el que no era muy conocido nos regalaba 5 duros y los más conocidos a 10 duros, al final tuve una buena boda.
He trabajado mucho en el campo, segando, cogiendo berza, habas, garbanzos, aceitunas y ahora ha llegado el tiempo de mirar más por nosotros, me dedico a las cosas que más me gustan y todavía puedo hacerlas, ir a la escuela, aprender el ordenador y pasito a pasito estoy aprendiendo a leer cada vez mejor.
He sido muy feliz en mi vida y lo sigo siendo
Se despide una amiga.



Mi historia. Carmen Muñoz Marín.


Yo soy Carmen y nací en un cortijo que le llamaban los “Peos”, nací el día 2 de octubre de 948.Yo nací, pues creo que como todos los bebes, la que hacía cuatro, porque somos ocho hermanos, seis niñas y dos niños, y mis padres no sabían como ponerme y mi mami se decidió por ponerme el nombre que tengo, Carmen. Cuando tenía siete años me regalaron una perrita que le puse el nombre de Turqui y era buenísima. Yo jugaba mucho con ella, pero yo no era tan buena con ella, la ponía en el suelo y le daba achuchones y un día la puse en el borde de una era que nos servía para trillar y se cayó y se echó a perder, pero no se echó a perder sino que con mis juegos le pegaba un pellizquito y se caía al suelo.
Desde los 13 años he trabajado en el campo, cogiendo aceitunas, segando, sembrando y haciendo todo tipo de tareas del campo. También he guardado animales como pavos, cerdos y cabras.
Cuando fui mayor con 20 años me hice novia de mi esposo. Nos casamos a los 4 años de novios en El Higueral. Iba vestida de largo con muy poca cola porque a mi no me gustaba la cola muy larga. El vestido me lo hizo una costurera de El Higueral. La celebración fue en un salón de la aldea de Lagunillas y cuando fui a quitarme el vestido de novia me di cuenta que había perdido un anillo de oro recuerdo de mis padres y volvimos al salón y nos lo encontramos todo pisado y lo tuve que mandar a la joyería para que lo arreglaran. Fui de viaje de novios a Cabra y a Sevilla.
Tengo 4 hijos,3 hembras y 1 varón. Ahora vivo con mi marido porque mis 4 hijos ya están casados. Tengo 4 nietos,3 niños y 1 niña.
Hoy día tengo sesenta y dos años y estoy en la escuela de adultos de las Fuentes de Cesna.
Aquí se termina la historia de mi vida.
Un Saludo.

Mi vida. Emilia Arenas Delgado.

Hola soy Emilia Arenas y os voy a contar un poco de mi vida. Mi vida ha tenido como todas las mujeres mucho cargo. Bueno nací en Palancar, éramos nueve hermanos cinco varones y cuatro hembras. Yo era la más chica de años y de cuerpo y mis padres como era más pequeña le decían a mis hermanas: “no le mandéis tantas cosas que es la más chica” y yo eso me lo aprendí pronto. En aquellos tiempos no había butano ni lavadoras y una familia de trece personas nueve hermanos, mis padres y mis dos abuelos, casi ná de faena, todos los días con las comidas, olla, potaje... para guisar teníamos una cubeta de chapa y le ponía un hierresillo y con yesos se hacían las trebesillas y le llamaban el alnafe. Debajo ascuas con carbón cuando pasaba un rato había que echarle carbón. Mis hermanas me decían ve tu y le echas carbón al alnafe y me acuerdo que les decía: mira lo que dicen nuestros padres, ellas decían: esta no sirve para nada y cuando tenia diecinueve años me vine de Palancar a Algarinejo mis padres y yo. Ya mis hermanos todos casados. Vivía en la tienda de mi cuñada Josefa y en la ventana de la tienda era mi comedor y allí puse yo mi maquina de bordar y empecé a hacer mi ajuarillo y pasaban las mujeres: ¡hay que cenefa más bonita! ¿puedes hacerme una? y entonces bordé para la calle. Bueno, a los veinte años conocí a mi marido. Era de Zagra. Los domingos venía y había un salón en lo alto de la plaza y venia un musico con un acordeón y formaban un baile muy bueno y el quería bailar conmigo, pero como era de lejos yo quería bailar con el pero la gente lo afeaban y a los dos meses de venir yo dije: éste es el que a mi me gusta y me hice novia de él. Cuatro años de novios, me casé aquí en Algarinejo. A los tres años vino mi hijo Rafael y dos mas adelante mi hijo Nasta. Los case a los dos y de dos hijos que tenia ya tengo seis contando a los nietos. También hemos aumentado la familia con mis dos nueras, Merche y M. Carmen. Mis nietos son Irene y Rafael Jesús que los quiero mucho y me quitan todas las penas.

Bueno y con Elena lo pasamos muy bien en los ordenadores y con nuestras excursiones como tirando fotos por las rutas y cuando llega mayo con las plantas y las flores. También me gusta la escuela de adultos mucho y me lo paso muy bien con mis compañeras y con mi maestra Rocío que es muy simpática y me despido hasta siempre.

Un fuerte abrazo de Emilia Arenas. Algarinejo



Presentación

Os encontráis en el blog de Las Lectoras en la Edad de Oro formado por mujeres de Algarinejo interesadas en aprender y compartir con todos sus vivencias y tradiciones que nos ayudan a comprender como han sido sus vidas.

La razón de ser de este proyecto es permitir que este grupo de mujeres, de edades comprendidas entre los 50 y los 80 años, tengan acceso a las nuevas tecnologías, y sepan utilizarlas gracias al centro Guadalinfo.

Del mismo modo, se pretende fomentar la lectura y escritura gracias a los recursos que proporciona la Biblioteca José Álvarez Lopera.